ECL.- Invitada: Claudia Castro Barnechea especialista en el derecho internacional de los derechos humanos, resume el caso de Camila «como todo aquello que el Estado peruano no debió hacer jamás a ningún niño/niña». El Comité de la ONU para los derechos del niño encontró responsabilidad internacional al Estado peruano por la violación de derechos contemplados en la Convención ONU para los derechos del niño. Se requiere cambios integrales que van desde lo institucional, infraestructura, educación, normativos, protocolos, atención en salud integral, entre otros» acotó.
El Estado tiene que garantizar el acceso a la salud y educación de Camila. Se necesita cambiar el contexto, para que no vuelva a repetirse casos como el de Camila. Otro de los aspectos centrales del dictamen ONU, es se le recomienda al Perú la despenalización del aborto en caso de niñas victimas de violencia.
Actualmente tanto el personal de salud de aquel entonces como los operadores de justicia como fiscalía y poder judicial que atendieron el caso de Camila, están en investigaciones en curso pero no aún con sanciones ejemplares al menos en la parte administrativa, por ejemplo, SUSALUD ha emitido un pronunciamiento a medias, lo propio ha hecho los respecticos controles internos del MP y PJ, pero que son investigaciones que están en curso. La omisión graves del centro de salud que atendió el caso Camila está el no haberla referido a otro centro de salud, para el caso de la información de la Guía que permite la interrupción voluntaria del embarazo y solicitar junta medica. «Ellos solo se limitaron a decir, que esa guía solo se aplica en hospitales públicos grandes» .
Otro aspecto, grave no haber atendido la salud mental de la niña cuando supo que esta embarazada de su padre fruto de la violencia sexual. ella entró en un cuadro de depresión aguda y en lugar de atenderla, el personal médico decidió continuar con el tratamiento del embarazo hasta el parto, sin importarle la salud mental de la niña y el shock en que se encontraba. Fruto del deterioro de su salud mental se genera el aborto. Este hecho implica que luego un personal medico acompañado de un policía vaya reiteradas veces a visitar a Camila cuando ya había abortado, para el tratamiento del embarazo. ¿Cuál embarazo? si a la niña le sobrevino el aborto. Esa conducta hostil agravaba aún más su estado emocional.
En cuanto a las investigaciones, de victima pasó a ser investigada por autora de su propio aborto. «Increíble! fue perseguida por la Fiscalía, investigación que fue archivada. El caso de Camila «como todo aquello que el Estado peruano no debió hacer jamás a ningún niño/niña».